domingo, 15 de julio de 2012

Juegos Olímpicos / El fin de los récords

¿El cuerpo humano se acerca al límite?

Por Nora Bär | LA NACION
 
En 1896, cuando el barón Pierre de Coubertin inició en Atenas la era moderna de los Juegos Olímpicos, los convocó bajo un lema inspirado en los míticos espectáculos que durante más de un milenio los griegos dedicaron a Zeus: Citius. Altius. Fortius (Más rápido. Más alto. Más fuerte).
Sin embargo, en cada nueva edición de este encuentro que congrega a atletas de elite llegados de los cuatro puntos cardinales, todos nos preguntamos si esos cuerpos que parecen moldeados en titanio y engarzados en engranajes de exquisita precisión seguirán haciendo honor al espíritu de constante superación que expresan estas palabras.


¿Hasta cuándo pueden seguir mejorando las marcas y las proezas pueden ser cada vez más deslumbrantes? ¿Nos estamos acercando al límite de las capacidades humanas?
La multiplicidad de factores que inciden en el rendimiento atlético hace difícil arriesgar una respuesta definitiva. "En las últimas décadas, los récords mejoraron, en algunos casos, significativamente -dice el doctor Norberto Debbag, cardiólogo y deportólogo del Club Atlanta-, pero esto dependió no sólo de elementos intrínsecos, sino también extrínsecos. Los primeros [propios del deportista], que siempre estuvieron y seguirán estando presentes cuando se busque bajar un récord, están determinados por la condición genética, la estatura, el tipo de fibras musculares predominantes... Los segundos dependen de la planificación sistemática del entrenamiento, de la mejora de las instalaciones, de las condiciones climáticas, de la tecnología, de la aplicación de investigaciones que descubren cuál es la mejor técnica..."
El libro Guinness de los Récords ilustra esta conjunción estelar cuando relata cómo obtuvo su marca más famosa el maratonista etíope Haile Gebrselassie. "[Haile] ya había establecido un tiempo récord de 2 horas, 4 minutos y 26 segundos en la maratón de Berlín de 2007, y volvió a participar con la esperanza de mejorar este increíble tiempo -cuenta-. Leyenda viva en su Etiopía natal (...), en 2008, estaba totalmente preparado para lo que iba a ser la maratón más rápida de la historia. Ese año, con anterioridad, había afirmado: «Seguro, es posible hacerlo en menos de 2 horas, 4 minutos, pero todo tiene que ser perfecto». En el evento, Gebrselassie cruzó la línea de meta en el asombroso tiempo de 2 horas, 3 minutos y 59 segundos. Realmente, había corrido la carrera perfecta."

Según pasan los años

Pero si bien está claro que las marcas mejoran, también es cierto que en las últimas décadas parecen cada vez más difíciles de superar.


"Tomemos como ejemplo la natación -propone Osvaldo Arsenio, docente, director nacional de Deportes y presidente de la comisión técnica de la Federación Internacional de Natación-. En los primeros juegos de Atenas, los 100 metros libres se ganaron en 1m, 22s. En Londres, el que gane va a bajar los 47 segundos, un avance impresionante. Para hacerse una idea del avance, hoy, cualquier chico normal de nueve años de la Argentina o de cualquier país del mundo que se entrene todos los días ¡puede nadar los cien metros libres en 1m 22s! Hace unas tres décadas, tuve un chico de 12 años que hizo los cien metros en 59 segundos... Imagínese lo que se ha progresado."
Uno de los principales determinantes de la superación es el entrenamiento, un proceso que se estudia hasta en sus más mínimos detalles. "Aunque seguramente Weissmüller iba más rápido, en cantidad de piletas, la práctica del célebre Tarzán era similar a lo que hoy le indican los cardiólogos a un septuagenario que tuvo un infarto -afirma Arsenio-. Y en ese tiempo, la gente decía que el entrenador poco menos que lo iba a matar..." Y enseguida agrega: "Pero aunque los récords son más difíciles de batir, cada vez nos acercamos más al límite".
"Las marcas mejoraron considerablemente durante el siglo XX -coincide el doctor Héctor Kunik, presidente de la Asociación Metropolitana de Medicina del Deporte-. Esto es consecuencia de los avances tecnológicos, la detección de talentos, los cambios en la nutrición de los atletas y las técnicas de entrenamiento. Sin embargo, la frecuencia de nuevos récords mundiales obtenidos legalmente, sin la utilización de elementos prohibidos, disminuyó considerablemente."
En lo que hace al corazón, una pieza indispensable en el esfuerzo deportivo, el doctor Juan Carlos Parodi, cardiólogo y jefe de Cirugía Vascular de los sanatorios de la Trinidad, se permite disentir. "Con ejercitación, se puede aumentar cada vez más el rendimiento cardíaco -dice-. En un corazón entrenado, baja la frecuencia y aumenta la potencia de bombeo. Hay gente que es prácticamente inagotable."

El "segundo aliento"

Según explica el especialista, contrariamente a lo que podría creerse, cuando se realizan esfuerzos extremos, el último en sentir el agotamiento es el músculo. "Lo primero que se fatiga es la neurona, después el axón [prolongación que conduce el impulso nervioso] y, por último, el músculo -subraya-. Por eso los deportistas hablan del «segundo aliento»; si persisten, se recuperan, y pueden seguir adelante."


A pesar de que el entrenamiento tiene un papel protagónico en los logros atléticos, Kunik advierte que la relación no es lineal. "Es frecuente suponer que a más entrenamiento, mayor será la respuesta física al ejercicio -dice-. Sin embargo, esto es relativo, ya que después de un determinado umbral individual, no se observa incremento de la capacidad funcional del atleta, e inclusive ésta puede decrecer. «Mas» no necesariamente es «mejor»."
Como destacan los expertos, los avances también vienen de la tecnología, la ropa, el calzado. "La garrocha, por ejemplo -recuerda Arsenio-, que al comienzo era de madera, ahora es de fibra de vidrio. Y hasta hay una especial para cada distancia que se quiere alcanzar." Según consigna la revista científica Physics World, el diseño de la jabalina debió ser modificado a mediados de los años ochenta (desplazando unos cuatro centímetros hacia la punta el centro de gravedad) porque algunos atletas podían lanzarla a más de 90 metros, lo que ponía en riesgo a los espectadores. La introducción de los trajes de baño de poliuretano, que finalmente fueron prohibidos, también resultó en un descenso abrupto de las marcas.

Capacidades y límites

"Si entendemos el rendimiento deportivo como la interacción de multitud de factores de muy diversa índole que influyen en los resultados deportivos, podríamos plantear la hipótesis de que si conseguimos que todos estos factores se desarrollen por completo en todos y cada uno de los deportistas que compiten, habríamos alcanzado el límite del rendimiento deportivo y serían imposibles nuevos récords. Diversos autores han trabajado en esta línea y han profetizado los tiempos que tardarían en batirse los diversos récords con éxito dispar", especula un editorial de la Revista Andaluza de Medicina del Deporte.
Un trabajo publicado en PLoS One en febrero de 2008, y firmado por Geoffroy Berthelot y colegas, concluye que en 1896 los atletas empleaban el 75% de su capacidad potencial, pero que en la actualidad ya están utilizando el 99 por ciento.
Según estos investigadores, las fronteras fisiológicas se alcanzarán en una generación. "Esto tendrá un impacto en las futuras condiciones del entrenamiento atlético y en la organización de las competencias. También podría alterar el lema y el espíritu olímpicos", sentencian

domingo, 1 de julio de 2012

ENTREVISTA A EDUARDO MANZUR

Más allá de la frontera...

Por Mónica Maud de Sánchez Profesora. Escritora. Santiago del Estero.


domingo, 01 de julio de 2012
Más allá de la frontera...
El escritor, quien ha recibido numerosos premios y reconocimientos durante sus años de pluma.
Eduardo Manzur, un escritor que ama, quiere, se divierte y sueña en el maravilloso mundo de sus libros y de los libros que lee, está convencido con su trabajo, - como lo dice él- “poco, mucho, bueno o malo, pero mío”, está buscando constantemente continuar con su estilo, no le interesa ser el hombre duplicado, quiere ser auténtico, quiere explorar sendas vírgenes para sorprenderse, para no perder su capacidad de asombro en este sorprendente mundo que le toca vivir.

Conversamos con él en razón del honor de haber sido galardonado en Italia.

-Quisiera que nos explique en qué consiste el Premio Internacional Roberto Rossellini Maiori Film Festival que acaba de ganar.
- En realidad, no he ganado el Premio Rossellini, sino que el pasado 17 de marzo, en el marco de la XII edición del Premio Internacional Roberto Rossellini Maiori Film Festival, he sido galardonado con el titulo de 1° Embajador del Premio Internacional Roberto Rossellini en el mundo. El premio nace en el año 2000 de la mano de la Asociación Maiori Film Festival, que idea la creación de un evento destinado a mantener viva la obra y las enseñanzas del gran director de cine Roberto Rossellini, quien a partir de la post guerra hasta el año 1953, elige la Costa de Amalfi y, en particular, Maiori como set ideal para algunas de sus películas. Entre ellas podemos citar “Paisà” (1946), “El milagro” (Il miracolo), segundo episodio de “El amor” (L’amore -1948), “La máquina matamalvados” (La macchina ammazzacattivi 1948), “Viaje a Italia” (Viaggio in Italia -1953). El proyecto fue inmediatamente aprobado y sostenido por parte de Isabella y Renzo Rossellini, quien actualmente es el director artístico y presidente del jurado del festival.

- ¿Cómo se siente al respecto, si consideramos que es común pensar –y así, expresarlo- que hay que irse de la aldea para triunfar?
- Me siento bien, halagado, ya que este premio significa mucho para mí, partiendo de la base que soy un escritor que me desenvuelvo solo, en todo sentido, por mis propios medios, es decir, a mí nadie me regala nada. Significa echar la vista para atrás y mirar lo que he sembrado con mi trabajo, es un premio internacional fruto de mi constante trabajo. Sí, a nivel internacional es un honor, sin dejar de recordar que en 1979 obtuve el primer premio en el Concurso Municipal de Poesía Madre de Ciudades, Primer premio en el XX Festival Provincial con la Obra Teatral basada en mi libro “La Tercera Argentina” y ahora el Roberto Rosselini, sin contar que están relacionados estrictamente con la parte folclórica.
-¿Cuáles serán sus funciones de “embajador” en Argentina del Premio R. Rosellini? Es decir, en qué exactamente reside este honor.
- La función exacta es difundir las obras de este gran director a nivel nacional e internacional, ya que este premio es convalidado en ese tenor “mundial”, es decir, la asociación puede enviarme a cualquier punto del planeta para representarla.
-Háblenos de sus libros. En las circunstancias en que fueron escritos…
- Hasta el momento tengo cuatro libros publicados, los dos primeros son mis pequeños poemas infantiles, dos libros que quiero mucho, “Lágrimas de Rocío” e “Imágenes”; ellos fueron la plataforma de lanzamiento hacia esto que es mi actualidad. ¿Las circunstancias? Fueron cuando el maravilloso mundo del amor golpeó las puertas de mi corazón. Eso son estos dos libros, puro amor, con sus virtudes y sus defectos de aquel momento. Quiero contarle que mi primer libro “Lágrimas de Rocío” Editorial Rueda 1971, fue presentado en los Estados Unidos y en el Líbano. Por ahí tengo archivado todavía un artículo de un diario norteamericano que se refiere al libro. Luego fueron “La Tercera Argentina” y “Cementerio de Presidentes”, a este último lo sigo presentando por distintas provincias. Estoy próximo a editar el “Diccionario de Rimas Quichuas Santiagueño” y sigo escribiendo un nuevo libro llamado “La Cruz”.
-¿Cree –o tiene planeado-usted que su último libro -“Cementerio de Presidentes”- sea apto para adecuar a un guión?
- Sí, se lo puede adaptar para un guión, tanto es así, que el director y actor de teatro Yan Pilán ya está en ese trabajo.

-Leímos una expresión del jurado del premio que nos llamó la atención: “por sus características de difusor de cultura, porque con su trabajo estimula a la gente a pensar y a reflexionar sobre temas importantes de actualidad…”, ¿podría indicarnos a qué se refiere puntualmente?
- Pienso porque leyeron mi currículum. En primer lugar, porque durante muchos años de mi vida me dediqué a la difusión cultural de nuestra provincia y del país. Y en segundo lugar, porque, en mi libro “La Tercera Argentina” se encontraron con eso, que la gente puede reflexionar sobre temas importantes de actualidad.

- ¿Un escritor santiagueño? Por qué…
- Tal vez sea porque hablo siempre de mi Santiago, de su cultura, y me identificaron como santiagueño y no como argentino como se acostumbra generalmente. Esto me enorgullece, Santiago está primero esté donde esté.

- ¿Un argentino? Por qué…
- Puedo darle distintas respuestas al respecto: en Europa, tratan a la gente que hace cultura o difunde cultura de otra manera, allá tienen un respeto único por todos los que hacen arte, allá no se compra la cultura, la cultura no está politizada. Le recuerdo lo que en alguna oportunidad dijo el filósofo español Ortega y Gasset, una vez terminada la segunda guerra mundial, en medio de tantos escombros por los bombardeos, lo primero que se les dio a sus habitantes fue cultura. Volviendo a la pregunta, pienso en varios aspectos, será por mi currículum o porque presenté un libro en español (que parcialmente fue traducido al italiano) y que tuvo una concurrencia masiva que ellos mismos la catalogaron como histórica.
-¿Por qué histórica la presentación de su libro?
- Por varios aspectos. Maiori, que es donde fue presentado el libro, está enclavado en la costa amalfitana, es un pueblo chico, con pocos habitantes, pero con una riqueza histórica importante. Ellos consideraron histórica a la presentación del libro porque en la historia de ese lugar, jamás la presentación de un libro tuvo tanta concurrencia, por la repercusión que le otorgaron los medios periodísticos, por la apertura que se hizo con un ballet de danzas clásicas que bailó con la música de Astor Piazzola en medio de los jardines que posee la Comuna municipal, porque el libro fue interpretado por un actor o porque una concertista de piano interpretó el repertorio de Astor, o por el asombro que les causó que muchos nativos de la zona compraran un libro escrito en español, vaya uno a saber. También quiero comentarle que, días antes de la presentación era un desconocido que caminaba por las calles del pueblo con mis nietos hasta la playa como uno más, después de este acto las cosas cambiaron, la gente comenzó a reconocerme.
-¿Este premio le cambió en algo la vida?
- Sí y no. El sí es porque se me ampliaron en poco tiempo las posibilidades de presentar mi nuevo libro en distintos lugares, lo que no tenía previsto, el hecho de que la gente requiera un poco más de mi persona para brindar algunas conferencias, algunos talleres o algunos encuentros de escritores que no estaban en mi agenda. El no es porque sigo en lo mío, escribiendo, sigo abrazado a esa hermosa soledad con que cuenta siempre el escritor para realizar su trabajo. Esto es así, diez minutos de inspiración y noventa de transpiración. Con respecto al premio, le digo que sirve y mucho, pero solamente como estímulo, no tengo que dormirme sobre los laureles, porque de ser así, me come el olvido.
- ¿Poesía o narrativa? Por qué…
- Me gustan todos los géneros, pero como decía Alain: “Cada metáfora en poesía es el descubrimiento de una ley del universo”.

-Le cambio un poco el tema porque queremos saber su opinión ¿Qué piensa de la falta de interés de los jóvenes en la lectura. O cree que la lectura aumentó?
-Antes podría haber contestado con certeza esta pregunta, porque los libros se vendían sólo en las librerías y uno podía estar al tanto de las estadísticas, pero ahora vivimos otro universo literario. Hoy con la Internet todo el mundo tiene al alcance de sus manos un libro, de ahí es que no puedo decir si leen más o menos. Le doy un ejemplo, la Unesco hizo el Lanzamiento en Internet de la WDL, Biblioteca Digital Mundial... ¿qué quiero decir con esto?, que una persona, sin moverse de su casa y sin comprar un solo libro tiene todos los libros del mundo en su hogar. A ciencia cierta no podemos saber o decir si los jóvenes leen o tienen o no interés debido a la tecnología, ¿cómo saberlo, con que parámetros se puede medir esto?
- ¿Su visión del arte en Santiago?
- Localmente lo veo bien, lo que nos está faltando es llevar más el arte de Santiago del Estero fuera de nuestra frontera, trabajar desde Santiago para el país y el mundo.

-Muchas gracias por su atención.
- A ustedes, que están al servicio de la cultura.