Esta no es un a noticia aislada, es cosa de todos los días, por donde uno transite por esta bendita provincia. Nos cansamos de sugerir cosas para el beneficio de todos. Nada. Este gabinete cuasi horroroso, continuará hasta la caída definitiva.
A nadie le importa que se le advierta cual es el camino menos dañino para transitar.
Cuando una sociedad rinde culto a los animales creando asilos para perros, sacándolos de la calle y/o vistiéndolos (ellos están dotados naturalmente para sobrevivir solos a diferencia de los humanos) cuando se escandaliza si una familia humilde se vale de un burro para tirar un carro (si así no hubiese sido la humanidad no hubiera llegado a la comodidad de hoy) suprimiéndole a esa familia el medio de subsistencia, cuando esa misma sociedad consume carne animal de manera casi excluyente a otros alimentos… cuando esa sociedad permite que haya humanos viviendo en tachos… es porque ha llegado el momento de un replanteo total de su coherencia, de su escala de valores, de analizar si estas expresiones por animales son reales o un simple vedetismo mediático.
Tratemos que no haya más humanos en la calle, no tenemos pieles, pesuñas, colmillos o garras para subsistir, necesitamos de otros humanos hasta que podemos desenvolvernos solos.
La preocupante situación de un niño de 11 años -que duerme dentro de un tacho- causa estupor entre los vecinos del Bº Avellaneda Sur de la ciudad de Beltrán, quienes radicaron la denuncia en la policía. El caso ahora está siendo investigado por la Justicia de La Banda.
Se trata de un pequeño que desde algunos años se encuentra en situación de riesgo. Antes dormía sobre los techos de una casa abandonada. Cuando el caso salió a la luz fue asistido, pero nuevamente se retiró de la casa donde reside su madre, la pareja de ésta y sus hermanos, aparentemente cansado de los malos tratos.
Los vecinos, al verlo deambular por la zona le hicieron un precario rancho para que éste se resguardara en las noches de frío y las lluvias. El pasado sábado -según revelaron fuentes consultadas- por causa que se desconocen, su humilde hogar se incendió mientras el dormía.
Afortunadamente los vecinos alcanzaron a ver las extensas llamas y de inmediato acudieron a ayudar al menor que se encontraba en el interior. Por fortuna, el niño solo sufrió un leve cuadro de asfixia por la inhalación de humo.
Desde que su "casa" se consumió por las llamas, el menor duerme en un tacho. Según contaron los vecinos a la policía. El recipiente estaba desocupado y a pocos metros del baldío donde habita, por lo que el niño no tuvo mejor idea que acercarlo para utilizarlo como su "morada".
La situación de calle que vive el pequeño llegó a la Justicia de La Banda y es la Dra. Inés Presti la encargada de la investigación. Según se supo, la madre del pequeño podría ser imputada por el delito de abandono de persona. Cuando los efectivos fueron a verla, la mujer indicó que no puede "contener" al niño ya que es muy rebelde. Ésta además tiene 6 hijos de otro hombre con el que actualmente vive. Del caso se dio intervención a la Dinaf. l
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